sábado, 19 de marzo de 2022

VI Kolazino Mendi Lasterketa

Bedia (19/03/2022)

Seguimos este 2022 rememorando "viejas" carreras y aquí estamos con la Kolazino, una carrera que me trae un sabor agridulce a la boca. Y es que esta carrera la hice en el 2019 (año desde el que por cierto no se había vuelto a celebrar debido a la pandemia) y la recuerdo muy bien... recuerdo que salió un día de sol del copón y que unido a que la carrera es dura de narices... pues lo pasé fatal. El momento dulce fue cuando crucé la meta básicamente. Pero bueno, que eso está olvidado y ahora vengo a resarcirme 💪

La carrera se celebra en Bedia y está englobada dentro de un conjunto de actividades en lo que se denomina el "Kolazino Mendi Eguna", que ofrece una marcha, una carrera corta y otra larga (este año parece que han dejado aparcada la marcha BTT), además de diversas actividades en la localidad para entretener al público. El grupo de Koldo Taldea que nos hemos juntado para la ocasión lo conformamos Alberto, Emilio, Mikel y yo, y como no puede ser de otra manera, nos hemos apuntado a la carrera larga. Parece que nos gusta sufrir... porque el recorrido sigue siendo básicamente el mismo del 2019, lo que se traduce en 24 kilómetros y 1.700 metros de desnivel positivo, una barbaridad... para mi cuerpo al menos a estas alturas de la temporada.

Vamos pues con el día de la prueba. Tras una reunificación en el parquing de las caravanas de Gasteiz, nos montamos todos en el coche de Mikel y al lío. Viaje no muy largo y agradable, aparcamiento en Bedia fácil, ya que tienen una zona industrial preparada para ello, y ya con todos los cachibaches nos dirigimos a la zona de recogida de dorsales, que es en el frontón de Bedia cerca de la salida. La carrera es puntuable para varios campeonatos y en ella se disputa otros tantos (ver cartel para más información :-P ) lo que se traduce en que el nivel es bastante alto, corredores jóvenes y atléticos por doquier 😜 que seguro corren que se las pelan... ¡y ahí estamos nosotros! Bueno, he exagerado un poco, hay nivel alto, de eso no cabe duda, pero hay de todo, y como muestra aquí estamos el Koldo Taldea jaja Y dentro del Koldo Taldea, pues en la carrera de Antzuola ya se vio que Alberto y Emilio van con un punto más que yo, y Mikel es un sufridor, así que para esta carrera ni pintado 🙈 por lo que ir con ellos no es objetivo oficial ni real. Tengo intención de salir tranquilo y sin reventar, para la ocasión me he traído la mochila de hidratación y los bastones, no quiero que me pase como la última vez. Si en ese ritmo voy con ellos perfecto, y si no, lo más probable, pues a mi ritmo. Esta no es una carrera larga, pero se puede hacer muuuuuyyyy larga.

Últimos preparativos (fot. Festak.com)
En el frontón, tras recoger dorsal y bolsa de corredor, hacemos los últimos retoques a la equipación. La pandemia sigue presente y es obligatorio ir con mascarilla por la zona y hasta que se de la salida, pero me da para reconocer a Raúl, que aunque no va a correr ha venido a animar. Al final esta prueba es bastante recomendable no solo para hacerla, si no también para venir a verla. Tras ajustar el dorsal y coger lo que vamos a llevar durante la carrera, el resto de cosas las dejamos en la consigna. Ya solo queda llenar botellines, evacuar todo lo que se pueda, y poner rumbo a la salida.

Mikel marcando territorio xD
(fot. Euskal Mendizale Federazioa)
Antes de la salida hay un control, principalmente por la mascarilla y el chubasquero cortavientos, que este año, aunque menos soleado que el 2019 pero igualmente caluroso, sigue siendo obligatorio. ¡Y con capucha! O gorro/buff en caso de no tener, que los que iban delante ya tuvieron que volver a coger una gorra por no tener capucha su cotravientos :-P
Ya en la salida, está organizada por cajones. Los pros adelante, el resto de los mortales atrás. A Mikel se ve que lo conocen, la locomotora da Veiga, le han puesto en el cajón de delante 😀 Pero nada, 5' antes de la salida liberan los cajones y nos podemos arrejuntar todo el grupo. Nos colocamos por la parte media trasera y, con el txupinazo de salida, allá que vamos.

Ya queda menos :-P (fot. Festak.com)
El inicio de la carrera es salir de Bedia, son 700 metros de asfalto donde el pelotón se estira y poder ir "jiji jaja", "¿cuánto queda?", "no parece dura" y chorradas similares. Sin embargo la broma acaba pronto ya que enseguida se entra en camino de tierra entre bosque. Los primeros charcos y zonas de barro empiezan a dar señales de vida, y es que aunque hace calor, durante la semana ha llovido bastante, Además por ahí hay zonas de barro sempiterno... así que al final no queda más remedia que pisar. Aún en carreras de montaña, el primer charco siempre es duro 😝
Ahí vamos los cuatro, los cinco mejor dicho, que Alex, un amigo de Alber y Emilio, se nos ha unido a la grupeta, saltando de un lado a otro del camino intentando pillar el ritmo lo mejor que podemos, ya que el camino, que da para dos filas, está repleto de otros corredores que nos adelantan o que van más despacio, zonas con mucho barro, etc. Mikel es el que más o menos nos marca la senda de oro hasta que llegamos a algo parecido a un cortafuegos que a mi al menos me sienta como un sopapo. Bueno, palitroques y poco a poco, que aún no vamos ni 2 kilómetros...

Cada uno a su rollo :-P (fot. Festak.com)
Aquí nos ponemos en fila india. Emilio coge la cabeza de nuestro pelotón particular, con Alex pegado a sus talones. Los arranques de carrera de Emilio son fuertes, así que precaución querido corredor... no intentar seguirle así como así. Mikel, que sabe como va el tema, le va un poco a la zaga dejándole ir un poco, yo le sigo un poco a la zaga a Mikel, y Alberto va pegado a mi, a la expectativa. En la primera parte de esta primera gran subida hay un descansillo con su bajada y todo. Aquí ya Emilio y Alex se nos han ido un cacho por delante. Mikel, Alber y yo nos reagrupamos más o menos, más o menos porque en seguida se pone otra vez cuesta arriba el camino y yo me coloco detrás para verlos irse poco a poco. Me están cayendo unos goterones de la frente que parezco un grifo. No se como irá el resto, pero yo prefiero beber agua y dosificar... esto tiene pinta de que se me va a hacer, OTRA VEZ, muuuuy largo.
La subida permite ver en la distancia por donde va la gente de delante. Así, veo a Mikel un cacho por delante mío también en solitario, y más arriba a Alberto que ya ha enlazado con Emilio y Alex, va como una moto el tío, envidia sana me da 😋 Yo de mientras voy haciendo cálculos en mi cabeza. Tras esta subida hay dos kilómetros de bajada y llano hasta la siguiente, ¿me dará tiempo a cogerlos? Estoy subiendo despacito pero sin quemarme, se puede intentar... ¡joder! Ya estamos en estas y la carrera acaba de empezar.
Bueno, al final decido, inteligentemente yo creo, no intentar una caza absurda que me iba a dejar baldado para quedarme según empezase la siguiente subida. Así que nada, bajo tranquilo e intentando recuperar, piernas y sensaciones, que no son las mejores por ahora. Según me contaron luego, esta bajada la hizo Mikel como... como un pepino cohete... dio caza a Alberto y Emilio e incluso se fue solo para adelante de cara a afrontar la siguiente subida. Lo dicho, la locomotora da Veiga.

Agradable bajada por los alrededores de Bedia
(fot. Festak.com)
Tras la "tranquila" bajada y llaneo, por camino de los que gusta correr y trotar, toca otro pequeño repecho que me quito andando tranquilamente. Y es que tras la bajada de ese repecho empieza la ascensión al techo de la prueba, el Mandoia, que recuerdo fue donde morí literalmente en la edición anterior. Este año espero no me pase lo mismo, aunque así de primeras ya voy peor 😓 y es que en el 2019, hasta el tramo final del Mandoia, fui bastante bien, mejor que ahora mismo...

Esta subida son prácticamente 4,5 kilómetros con apenas un descansito justo antes del tramo final. Pues nada, ¿cuál es el plan?, tipi-tapa con los palos y no morir por el camino... He empezado la subida con apenas una hora de carrera y llego arriba con, prácticamente, dos horas de carrera... Una horita subiendo, que rica. La subida la he hecho bastante despacio, pero sin parar. No me ha pasado gente en exceso (unos cuantos si lo han hecho), sobre todo comparado la parte final en el 2019, pero claro, en 2019 de primeras iba algo más adelante y subí bastante bien hasta el final, que peté e incluso llegué a pararme, momento en el que me pasó un buen pelotón. Este año no he parado, pero he subido más despacio en general (por tiempos en 2019 subí más rápido) y los que me han ido pasando ha sido más escalonadamente, lo que da la sensación de que no es tanta la gente que te adelanta, pero bueno, si los hubiese contado habría que ver...

Tras acabar la subida al Mandoia, la verdad es que me quito un gran peso de encima. Pero no cantemos victoria, que aún queda mucho... De primeras tras la cima hay una zona de bajada en falso llano, con algún tramo que incluso pica para arriba hasta llegar a un avituallamiento que da el pistoletazo de salida a la bajada en si. Por este tramo me alcanza un corredor y me dice "¡Por fin te alcanzo!", ehhh ¿Hola? ¿Te conozco? Como suponía, se ha confundido: "Ahhh, te llevaba viendo de lejos un buen rato y pensaba que eras un colega. Ya me extrañaba verle tan atrás" me dice 😆 Su amigo no es tan paquete como yo jaja Voy con el hasta el avituallamiento, donde sale escopetado para abajo, supongo que a intentar alcanzar a su amigo no paquete 😋 Yo me lo tomo con más calma, rellenar bidones, que los llevo a 0 y recuperar algo, que falta me va a hacer.

La bajada la hago tranquilo pero dejándome llevar, que si me ralentizo en las bajadas igual llego fuera de tiempo... Mantengo distancias con algún corredor que me ha pasado en la última subida he incluso llego a pasar a alguien, hasta que la carrera se pone cuesta arriba, momento en el que me vuelven a pasar a mi. Mi velocidad de crucero de subida es entre lenta y muy lenta, y eso que este año me he traído los bastones precisamente para ayudarme en las subidas... Y es que en la mitad de la bajada hay un repecho de aúpa, de esos de "que bien estoy yendo en la bajadita tralali-tralala" y toma rompe piernas. Medio kilómetro de repecho, que eso ya es para darle otra entidad. Aquí me pasa un corredor al que voy a ver bastante en lo que queda de carrera, uno con un tatuaje en la pierna y camiseta morada. Lo que el sube de más yo se lo recupero bajando jeje Así, cuando empieza la otra mitad de la bajada tras el repecho, que empieza con una bajada bastante pronunciada en zig zag, soy yo el que le pasa.

Se avecina una gorda... (subida)
(fot. Festak.com)
¿Y tas la bajada del Mandoia que viene? Pues otra subidita de las buenas uffff que perezaaa. Esta la otra vez, si no me equivoco, la pusieron como subida de kilómetro vertical. No es un kilómetro vertical, pero es un kilómetro y pico de subida dura dura. Así que nada, bastones y tipi-tapa. No voy muy rápido, porque me van llegando algún que otro corredor por detrás, entre ellos el de la camiseta morada 😉 pero tampoco voy tan lento ya que deciden quedarse a mi ritmo. Pim pam pim pam la presión no me deja bajar el ritmo hasta que, ya pensando que llegaba a la cima en un cambio de rasante, veo que no, que aún queda... Esa visión de ver que sigue para arriba me hace pararme a enfriar las piernas, que las llevaba a fuego, y dejar pasar a la hilera que iba detrás mío para así poder acabar lo que queda de subida ya más tranquilo. 

La bajada es también bastante empinada, la hago forzando un poco más la máquina. Al final de ella hay un avituallamiento donde pretendo estar un buen rato recuperando para el tramo final. Así que aquí si, paso a unos cuantos corredores, principalmente a los que me pasaron en la subida 😄 y es que ya nos conocemos todos... Y así llego al avituallamiento de Ereño, km 19'2, con casi 3h10' de carrera. Agua, coca-cola, fruta, rellenar bidones, que los voy exprimiendo de avituallamiento en avituallamiento (día de caloret total, voy a empezar a echar de menos las carreras de barro y lluvia) y un gel para afrontar la penúltima tachuela un poco seria de la carrera.

Prácticamente todos los que he pasado en la bajada me han adelantado en el avituallamiento. Bueno, era cuestión de tiempo que me pasasen, porque nada más salir del pueblo pica para arriba 😪 Esta subida no es muy larga, así que además recién avituallado, procuro mantener el tipo a un ritmo decente. En esta subida, me sonaba que había un tramito con cuerda fija de lo empinado que era, pero no se si porque lo han quitado o es que simplemente ya no veo ni por donde voy, este año no lo cojo. Y es que voy pensando en mis cosas, en como lo hice hace 3 años, que acabé penosamente, y este año que me decía a mi mismo "bueno, lo tengo fácil para mejorar mis tiempos", pues voy camino de hacer buenos los anteriores... Pero aún tengo una pequeña esperanza de acabar antes de las 4 horas, así que, sin sufrir mucho 😒 pero sin dejarme llevar por el ritmo pachanguero, intento forzar para hacer la bajada decentemente rápido. Al final, de lo que más estoy sufriendo es de piernas. De caja no voy mal, pero las piernas a la mínima que fuerzo se me recalientan y yo soy de los que a la mínima que no carbura todo bajo el ritmo, sobre todo viendo que aún quedan unos cuantos kilómetros para acabar...

Aún así, intentando bajar a ritmillo, hago la bajada más solo que la una. Se nota que todo el mundo huele la meta y se está exprimiendo más que en otras bajadas porque no he pillado a nadie. A falta de poco más de 3 kilómetros para la meta está el último avituallamiento líquido, en la localidad de Utxarain. Es justo antes del último repecho y, como voy con los bidones bastante llenos, paro lo justo para beber un poco de agua en vaso, saludar y despedirme del corredor de camiseta morada que si que está reponiendo bidones. ¡No estoy solo! La despedida es un hasta luego, ya que seguramente me pille en el repecho 😆

Ya no queda nada, huelo la meta y el repecho se me hace hasta corto, y de nuevo en solitario totalmente, no me da alcance ni siquiera mi compañero intermitente. Bueno, eso quiere decir que no voy tan mal, o que le ha pegado bajonazo total al otro... vamos a pensar que ha sido por la primera opción 😋 Tras el repechín, bajada, y luego hay un par de kilómetros de subi-bajas que buff, se me hacen más duros que la subida anterior. Con Bedia ya a la vista y aún sabiendo que no queda nada, cada subi de los subi-bajas me rompen totalmente el ritmo, que me hacen ponerme a andar... Y así voy, un ratito a trote y otro caminando, hasta llegar a Bedia en si, donde ya tiro de orgullo para trotar en la entrada triunfal a meta, donde están Alber, Mikel y Leti animando. Veo que ya está todo preparado para la entrega de premios, pero porque ya la han hecho 😅 El tema es que para la entrega han puesto un cartel promocional de la carrera que cubre casi todo el arco de meta y me obliga a agacharme, ¡¡mis riñones!! La última prueba que me pone esta exigente carrera 😪 He tardado ni más ni menos que 4h09'18", casi nada... en hacer los se supone que 24 kilómetros, aunque a mi siempre me sale de más, será por eso que llego tan tarde a meta 😜

Se abre el telón... y aparece un
Beni reventado (fot. Festak.com)
Alberto y Mikel llevan ya un buen rato esperando, de hecho Emilio ha marchado ya con Jose, que había venido con Leti a ver la llegada, y tenían algo de prisa. Alberto ha hecho 3h26'27", Emilio ha pinchado un poco al final (respecto a Alberto) y ha hecho 3h35'43". Mikel por su parte ha hecho casi toda la carrera con un grupete de 3 veteranos con los que casualmente hice yo la primera bajada. Le dieron alcance en la subida a Mandoia y se arrejuntó para acabar con ellos la carrera en 3h54'21". Alex llegó un poco después de Mikel, en 3h58'35". La sensación general es... ¡¡¡esto es muy duro!!! Eso si, el avituallamiento final de lujo, hay de todo, pero de todo todo, que incluso acabamos llevándonos unos tuppers de pasta y carne con patatas en su salsa para casa. Es una de las ventajas que tiene llegar de los últimos, que ya se puede saber que va a sobrar y no hay problema en llevarse para casa 😋

Y nada, ya con la sed y gula saciada y la comida preparada para cuando lleguemos a casa, solo queda cambiarse y poner rumbo a casa. Carrera dura, pero seguro que nos volvemos a ver por aquí. Este año me lo he puesto más fácil que nunca para mejorar 😂

Resultados (sobre 24 km):
1º Asier Larruzea Fernandez: 2:10:46 (5:26/km)
2º Hodei Samaniego Bouso: 2:11:49 (5:29/km)
3º Imanol Goñi Aranburu: 2:13:57 (5:34/km)
1ª Oihana Azkorbebeitia Urizar: 2:34:27 (6:26/km)
2ª Malen Osa Ansa: 2:36:43 (6:31/km)
3ª Andrea Garay Zarraga: 2:47:52 (6:59/km)

Resultados personales:
- Tiempo oficial/real: 4:09:18 / 4:09:02
- Ritmo real: 10:22/km
- Diferencia primero: 1h59'16"
- Posición General: 267/280 (294)


Las conclusiones, pues ya he dicho más o menos. Este año venía peor preparado, pero como en el 2019 pinché pensaba que podría mejorar mis tiempos. No ha sido así, de nuevo día de mucho calor, y de nuevo pinchazo. Y es que esta carrera es muy dura, a Mikel y Emilio no se si les volveremos a engañar para venir jaja pero bueno, yo la sigo manteniendo en la agenda, porque dentro de la dureza es una carrera muy chula y muy bien organizada, y yo además estoy dejando (involuntariamente) mucho margen de mejora para el futuro 😁

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